Simulaciones de NIM: Movimientos de curvas de tipos de interés

Como ya indicamos en entradas anteriores la medición de la sensibilidad del margen financiero o, por sus siglas en inglés, NIM es una medida complementaria al EVE que sirve de apoyo en la toma de decisiones para la gestión del ALM.

El margen financiero es simplemente el beneficio neto que se obtiene en la operativa bancaria de tomar prestado y prestar. De este modo, por sensibilidad del margen entendemos el grado en que una variación en los tipos afecta al margen financiero.

Por lo general, las herramientas avanzadas de gestión no son capaces de calcular la sensibilidad del NIM. En cambio, sí permiten calcular el margen bajo distintos escenarios por lo que, tras algún pequeño cálculo, será posible mostrar la sensibilidad en la herramienta de simulación que hayamos elegido.

A continuación explicamos los movimientos que se usan más frecuentemente  y presentamos una  ligera visión de sus pros y contras.

A lo largo de toda la entrada y de cara a entender los gráficos, aunque no lo mencione expresamente, la visión es siempre la de una entidad financiera que se financia a corto y presta a largo plazo.

Movimientos paralelos o Shock:

Mediante los movimientos paralelos se simula un cambio en el tipo de forma instantánea. Este tipo de simulación es el más común y suele ser exigido por los distintos reguladores en los informes periódicos que solicita.

Los movimientos más utilizados son los de +25pb, -25pb, +50pb, -50pb, +75pb, -75pb, +100pb y -100pb

Si bien un cambio de 100pb no suele ocurrir de forma instantánea, este tipo de movimiento de curva es el más usado por la claridad de los resultados que arroja en cuanto a sensibilidad del NIM.

Como se observa en el siguiente gráfico, un shock de -100pb haría que el margen de la entidad financiera fuera mayor en el corto plazo y notablemente menor en el largo permitiendo a los gestores adelantarse a la situación y realizar las coberturas que estimen necesarias en función de los requisitos de la entidad.

El gráfico anterior solo aplica para entidades cuyos activos tengan un plazo de reprecio mayor al que presentan sus pasivos. Este puede ser el caso de la banca comercial tradicional, financiada con depósitos e IPFs a corto plazo e invertida en prestamos a la vivienda.

El principal problema que surge del uso de este tipo de movimientos es que no tiene en cuenta posibles variaciones en la tendencia de la curva de tipos. Es decir, ante una previsión de bajada de tipos en el largo plazo, para banca comercial tradicional, alguien podría pensar que basta con cubrir el largo plazo pero, ¿qué ocurriría si en el periodo de transición hubiera subidas intermedias de tipos? El banco podría tener pérdidas no previstas en esos periodos.

Debido a la problemática comentada, para las simulaciones también se utilizan los movimientos de pivotaje que explicamos a continuación.

Movimientos de pivotaje o Flattening & Steepening:

El movimiento de pivotaje está compuesto por un movimiento de aplanamiento  flattening- y otro de incremento de pendiente  steepening-.

El movimiento flattening supone un primer shock, en el gráfico +100pb, que se mantiene hasta un determinado tenor, entendiendo por tenor una unidad de tiempo, por ejemplo 3 meses. A partir de este momento, comienza un movimiento  que concluirá con un movimiento paralelo a la curva de tipos al que se le aplica la misma variación que al shock inicial pero con signo cambiado: -100pb.

En el caso del movimiento steepening sucede exactamente lo mismo, salvo que el primer movimiento es una disminución del tipo con respecto al tipo de mercado y finalmente la curva simulada acaba por encima de la real.

Como comentábamos anteriormente, este movimiento sirve para poder tener en cuenta los cambios de tendencia en la curva de tipos. Como se observa en el gráfico siguiente, para el caso del escenario steepening la entidad financiera podría poder dejar correr las ganancias, ya que tanto en el corto como en el largo plazo, la entidad se vería favorecida por la curva de tipos. En el caso del flattening pasaría todo lo contrario y la empresa debería cubrir este riesgo.

Movimientos paralelos progresivos:

Este último tipo de escenario para  la simulación del riesgo de tipo de interés es quizás el más realista. Se presuponen variaciones instantáneas de poca intensidad en el corto plazo, +25pb o -25pb, por ejemplo, para, progresivamente, llegar a variaciones más pronunciadas como podrían ser +100pb o +250pb.

Nada impide hacer lo contrario con las variaciones, me explico: que el primer cambio instantáneo sea más radical para ir aminorando el movimiento progresivamente. Es muy extraño que esto pueda ocurrir en un mercado abierto, por lo que no le dedicaré más tiempo a este escenario.

En cualquier caso, el primer escenario de movimiento paralelo progresivo que planteo, pese a ser bastante realista, complica la interpretación de los datos y la toma de decisiones basadas en los mismos, como se puede observar en el efecto que se produce sobre el NIM:

En esta entrada, he tratado de describir los movimientos más comunes (en banca comercial) para la simulación de margen financiero, aunque otros muchos, incluso escenarios hechos a medida, se podrían utilizar en entidades que tengan potentes y probados equipos encargados de la predicción de tipos. ¿Qué otros tipos creéis que deberían incluirse y para qué tipo de institución financiera?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*
*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.